Xin Zhao volvió a Jonia en busca de información sobre la florescencia indómita de antaño, pero acabó teniendo que defender el templo kinkou de una horda de demonios. Yunara y él se hicieron con la victoria, pero su lanza de acero demaciano se quebró en combate. Ahora, con la bendición de la magia kinkou y su lanza reparada, Xin Zhao se prepara para enfrentarse a lo que le aguarda en el reino espiritual...