Contempla las temibles mandíbulas y las afiladas extremidades de esta imponente estatua, inspirada en alguna bestia feroz que moraba en lo más recóndito del bosque salvaje. Aunque infunde miedo en el corazón de los guerreros más valientes, su objetivo es el mismo que el de las demás obras de petricita: proteger al pueblo de Demacia frente a cualquier amenaza mágica.