Tristana fue la primera en presentarse voluntaria para unirse a los chamanes de la lluvia cuando la sequía azotó su tierra. Croaqui, su mejor amigo, le cantaba hasta que se dormía todas las noches cuando era un bebé; pero, ahora que ha perdido la voz, solo puede croar. ¡Es una tragedia! Croaqui la ayudó, así que ahora Tristana le devolverá el favor recuperando su voz, aunque eso implique marchar hacia el Gran Estanque por su propio pie.